Final World Tour. ¿Cuántas veces hemos leído esas palabras? Kiss, Scorpions, Deep Purple, Judas Priest, Aerosmith, etc, etc, etc. La lista continúa y se torna en un sinfín de nombres que no vale la pena explicitar.
Allí por enero del año 2018, un curioso video aparecía en las redes sociales. El mismo anunciaba la retirada de Slayer y ponía lo siguiente:
The End is Near... Slayer to make its exit with one, final world tour
El final está cerca... Slayer hará su retirada con un último tour mundial
No voy a negar que al ver aquel pequeño video una parte de mí (y calculo que de tantos otros) se apenó. Que Slayer, una de las bandas más influyentes dentro del Thrash y el metal extremo, anunciase su retirada, significaba una pérdida gigante para el género. Sin embargo, tendríamos la chance de disfrutarlos una vez más, o un par de veces si viajar se encontraba dentro de tus posibilidades.
Las preguntas comenzaron a invadir la web y en un momento me pregunté: ¿Es verdaderamente el fin? ¿O será como esas tantas otras bandas que amenzaron con despedirse para siempre y hoy en día están entrando al estudio a grabar su próximo disco?
Eventualmente llegue a la conclusión, y tras haber conversado con varias personas al respecto, de que, efectivamente, este es el fin de Slayer. ¿Cómo llegué a este veredicto? A través de estos dos puntos.
LA MUERTE DE JEFF HANNEMAN
Lógicamente, era de esperarse que este fuera uno de los aspectos condicionantes. Tras el fallecimiento del guitarrista fundador de la banda en el año 2013, Slayer perdió un cierto grado de atractivo, así como también se volvió una de esas bandas semi-bastardeadas por continuar sin uno de sus miembros originales. Repentless, el primer disco de la banda sin Hanneman tras las seis cuerdas, fue un trabajo muy bueno. Pero el impacto sin Jeff no fue el mismo, a pesar de tener a un monstruo suplantándolo como lo fue y aún es el señor Gary Holt.
TOM ARAYA DICE BASTA
Todos amamos al tío Tom, pero es cierto que más de 35 años de gira continúa llegan a cansar hasta al rockero más acerrimo. Araya ha comentando en diversas entrevistas que girar se le estaba volviendo más y más cuesta arriba. Ha dicho que estar mucho tiempo alejado de su familia ya le resulta complicado. Además, hace más de 10 años que el vocalista no puede realizar ningún Headbang en el escenario debido a su cirugía de cuello, habiendo él mismo aclarado que es algo que le molesta mucho no poder hacer en vivo. Las ganas ya no son las mismas, y los tiempos tampoco.
¿Son estos puntos algo obvios? Tal vez. Pero es fundamental que los comprendamos para entender el porqué de la retirada de semejantes eminencias del rock pesado. Ya continuar sin Jeff fue una cruz difícil de cargar para la banda. Con un Tom Araya desganado, sería imposible para Kerry King continuar con la banda. De todas maneras, el guitarrista ha anunciado que tiene planes de continuar con la música durante un largo tiempo.
Por supuesto que uno no tiene la bola de cristal, y es imposible conocer con absoluta certeza el futuro de una banda y de sus músicos. Lo que si tenemos clarísimo es que esta gira de Slayer hay que aprovecharla al máximo. La banda estará llegando a Latinoamérica entre los meses de septiembre y octubre, y será, muy probablemente, la última chance que tengas para ver llover sangre en vivo y en directo. Larga vida a Slayer.
PD: SLAAAAYEEEEEEERRR
Slayer: ¿Es verdaderamente el fin?
Reviewed by creativosnativos
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junio 04, 2019
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